En vez de cambiar radicalmente el mundo tal y como lo conocemos, COVID-19 ha acelerado principalmente las tendencias existentes.
La pandemia del Covid-19 no cambió radicalmente al mundo como hasta ahora lo conocíamos, como algunos piensan, más bien aceleró las tendencias existentes.
Factores como la digitalización de la vida cotidiana, acuerdos laborales más flexibles, la desaceleración de la globalización, el debilitamiento del multilateralismo, la expansión del Estado y la vulnerabilidad de las ciudades ya estaban en marcha antes del virus.
Más que un cambio radical, es la consolidación de tendencias que ya existían y que sin el virus hubieran tardado años, quizás décadas en ser una realidad para la vida cotidiana.
Tendencias a seguir en los próximos meses.
1. Nearshoring
El concepto de nearshoring se refiere a una subcontratación en el extranjero de una actividad con salarios más bajos que en el propio país; relativamente cerca en la distancia o en el mismo huso horario.
El nearshoring se convirtió en la nueva apuesta de las empresas en países desarrollados, en la búsqueda de eficiencia y bajo costo. Y aquí es donde América Latina se pone a valer.
La globalización no se revertirá, sino que se enfocará en la diversificación regional, América Latina ofrece al mercado norteamericano una combinación única de proximidad geográfica y socios con las capacidades desarrolladas para dar servicios de calidad a sus clientes. Entre los países con mayor potencial destacan México, Guatemala y El Salvador.
2. Vigilancia
Es conocida la cantidad de datos que muchas empresas recolectan de sus usuarios. Dependiendo del perfil de la empresa, éstos van desde hábitos de navegación hasta información logística de lugares geográficos que se visitan con frecuencia.
La vigilancia y recopilación de datos personales ha hecho que los estados y las empresas se conviertan en imperios de información. La protección integral de la privacidad es crucial.
Las normas aprobadas por los funcionarios públicos del poder legislativo deberían incrementar los derechos de los ciudadanos a proteger su privacidad.
3. Trabajo
El trabajo remoto llegó para quedarse, fomentando mayor flexibilidad y nuevos estándares en el mundo laboral.
Ventajas:
· Se trabaja en dónde se siente más cómodo
No es necesario asistir a una oficina, se pueden realizar las actividades laborales desde casa, un café o desde cualquiera que permita la concentración necesaria.
Varios trabajadores remotos asisten a espacios de coworking o a cualquier lugar en el que cuenten con acceso a Internet. La flexibilidad de esta modalidad siempre será una ventaja que todos desearían conseguir. Adiós al tráfico y al clima lluvioso.
· Los empleados ganan más tiempo para sí mismos
Con el trabajo remoto, los colaboradores de las empresas administran su tiempo por ellos mismos. Así consiguen mayor autonomía y un balance entre su vida profesional y personal.
· Las empresas disminuyen costos
Cuando la mayoría o la totalidad de los colaboradores de una empresa trabajan de forma remota, no es necesario contar con infraestructuras y grandes instalaciones.
4. Educación
El aprendizaje permanente se convertirá en parte clave de la vida de todos, para crear una fuerza laboral adaptable y desarrollar habilidades que enfatizan la ventaja humana sobre las máquinas.
Para atender necesidades de especialización y actualización, este recurso seguirá funcionando, sin embargo, se deberán analizar rigurosamente los modelos que se han implementado.
De entre las principales problemáticas que ha ocasionado la educación a distancia durante estos varios meses en los que prácticamente la totalidad de los alumnos de todos los niveles se vieron obligados a adoptar la modalidad en línea, aparecen el estrés, ansiedad, dolores de cabeza y ojos llorosos, además de pérdida de interés en el estudio, como síntomas entre estudiantes y maestros.
5. Descentralización
Esto sucede en la mayoría de casos en empresas de gran tamaño, o que abarcan distintos mercados simultáneamente. De este modo es más fácil controlar su funcionamiento, ya que se conocen las necesidades específicas de cada rama de la organización.
La descentralización puede venir de la mano de la especialización del trabajo, incluso puede favorecerla atendiendo a las necesidades específicas de los diferentes puntos de su organigrama. Esto sucede al existir distintas áreas administrativas (legal, fiscal, laboral) y diferentes tomadores de decisión enfocados en cada materia.
Las ciudades sobrevivirán, pero se adaptarán, dejando espacio para más descentralización regional y un renacimiento de las pequeñas ciudades del mundo desarrollado.
A lo largo de la historia, las crisis de salud han contribuido a impulsar la innovación científica y social, dando forma a los caminos del desarrollo económico. La crisis actual no será una excepción, pero en lugar de cambiar radicalmente el mundo se aceleraron las tendencias existentes, provocando cambios estructurales en muchos sectores.
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