La opinión sobre la última década en la que el Rock gozó de reflectores.
Llegó la década desconocida, terreno inexplorado, inseguro y curioso. El torrente evolutivo comenzó a fluir con una velocidad frenética que escapó de nuestro control. Vimos, sin meter las manos el nacimiento del reguetón y la popularización de "lo orgánico, artesanal, vegano, libre de gluten y deslactosado", que terminó con los últimos chispazos de genialidad del Rock mainstream.
Se nos preparó para esto desde que nacimos, la generación Millennial integramos un experimento que (al parecer) nos apagó el cerebro y dejamos de ser un público exigente, nos conformamos con lo instantáneo, igual que la mayoría de los productos que venden las grandes compañías que monopolizan el mercado, así funcionó el musical: poca variedad y todo genérico cambiando el empaque.
Frecuentemente se critica al Rock mainstream por equipararlo con música de poca calidad, pero esto no es así, o si lo fuera ¿cómo explican los detractores que las bandas que consideran como "grandes", Pink Floyd, Led Zeppelin, Guns and Roses sean parte de las más vendidas de la historia? Obviamente fueron muy mainstream, así que de ése mercado salían las grandes "joyas" del Rock.
La reflexión queda para muchos debates, por lo pronto, aquí proponemos un listado de 20 canciones que pudieron trascender por el éxito que tuvieron en la década de principio de siglo, en esta entrada aparecen las primeras 10, con un par de empates considerados para no dejar fuera a muchas que también fueron muy representativas de los estilos y las sensaciones del mundo en el que fueron concebidas.
Número 20 (Empate)
The Reason de Hoobastank (2003) No hay mucho que decir de esto, una banda sin trascendencia colocó un hit de mucho éxito. Una buena canción que aún se escucha en alguna estación de radio de "exitos del pasado", sin embargo, como tod One hit wonder, desapareciéron los autores y nunca más se volvió a escuchar algo de ellos que alcanzara una fracción de la atención generada por esta balada.
You’re Beautiful de James Blunt (2004) La primera vez que se escucha parece un descubierto único, momento mágico que detiene el tiempo y llena el espacio con una melodía llena de emotividad y sentimiento. Es mejor recordarla de esa forma, que describir el sentimiento después de miles de repeticiones en todos los medios posibles, que terminó con rechazó a la canción y a James Blunt, que la sobreexposición de este tema, lejos de beneficiarle, destruyó su carrera.
Número 19
Bring me to Life de Evanescence (2003) El New metal había inundado la música, aparecían bandas hasta debajo de las piedras, la influencia era tan grande que hasta músicos serios "vendieron su alma" para levantar sus ventas y ampiar su “cartera” de fans. Cada 2 años llegaba un mesías: RATM “los papás”, Korn “la bandera”, Limp Bizkit “los voceros”, Linkin Park “los genios”, Slipknot "los rudos", en fin, todo se vendíó como valioso y millones de jóvenes seguían esta ola. Cuando apareció Evanescence como si fuera algo nuevo al incluir una voz femenina, sorprendieron a muchos que aún oponían resistencia. Eso terminó por fusionar el mercado europeo (hasta ese momento underground), con etiquetas como Gothic metal en bandas que ya manejaban esta línea, pero con mejores voces, música más oscura, más dura y más interesante.
Número 18 (Empate)
Sing de Travis (2001) Travis es una de las últimas grandes bandas de Rock que surgieron para mantenerse y comprobar la solidez de un proyecto bueno, honesto y capaz de ser fiel a un estilo por donde muchos ya han pasado y no hay nada que descubrir. Sus álbumes son diferentes entre ellos pero similares en su estilo; Sing es una canción sencilla, melosa, hecha para convertirse en un éxito. Algunos minimizan la calidad de estos músicos, pero en sus shows en vivo y sus 30 años de existencia sustentan la grandísima calidad y entrega con la que hacen su trabajo.
It’s my Life de Bon Jovi (2001) A esta banda le gusta hacer dinero; lo entendieron: renovarse o morir. Por eso al inicio de la década trabajaron con Max Martin, compositor y productor sueco conocido por éxitos como Baby one more time (Britney Spears), Everybody (Back Street Boys), otras de Katy Perry y Taylor Swift, y decenas de artistas pop. El resultado, un éxito.
Muchas agrupaciones sacrifican creatividad, atrevimiento y cambios cuando los fans demandan que se mantengan “fieles a sus raíces”, limitando la posibilidad de ofrecer algo diferente, ya que la pseudocrítica siempre reprochará lo que no produzca la mayor cantidad de ganancias para la industria. Es así como el fenómeno Indie fue lo único vivo 10 años después, y a finales de 2021 es casi imposible rescatar algo.
Número 17 (Empate)
Boulevard of broken dreams de Green Day (2004) Es indudable que fue un hit, el sencillo más exitoso de la banda, la novena canción más vendida de la década, entre montones de reconocimientos más. Es difícil aceptar que una banda conocida por una década de hacer música que identificó a una generación por transmitir algún rasgo de rebeldía, cambió para a tocar música para emos, se maquillaron y pusieron tristes.
She will be Loved de Marroon Five (2002) Aparecieron de la nada como una banda de Rock-pop preparada para el éxito, sobre todo con el público femenino. Contrario a lo que se hubiera pensado, no fue un éxito efímero: ¿la diferencia? Quizá se debió a que son músicos de verdad, preparados y que han sabido moldear su sonido a las necesidades del tiempo; tanto, que esta canción parece seguir vigente.
Número 16
Starlight de Muse (2006) Muse había lanzado 3 discos buenísimos: Showbiz, Origin of Symmetry y Absolution, que aunque no habían pasado sin pena ni gloria, no gozaban de muchos reflectores (al menos en este continente), cuando de pronto, alguien se imaginó que podía sacar millones de dólares explotando esa mina de oro; ahí acabó su buena música y empezó su sobreexposición y caída en picada de su calidad, de ahí viene este tema. Le pasó a AFI y le pasaría a Kings of Leon, bandas con más de diez años de trayectoria de pronto pasaron a ser el “gran descubrimiento”, así continuaba el cortejo fúnebre del buen Rock comercial.
Número 15
Toxicity de System of a Down (2001) Si hay algo que defina la música de System of a Down es la originalidad, quizá por sus raíces armenias o simplemente por tratarse de una banda que explora más que la mayoría, tanto musicalmente como por los temas de sus letras; críticos, analíticos de su sociedad, las injusticias y problemas de nuestro tiempo; todo esto en conjunto con el estilo musical que amalgama melodías que recuerdan el Medio Oriente, tocadas con la fuerza e intensidad del metal, para unirse a una voz espectacular y expresiva, dan como resultado una banda de enorme calidad.
Número 14
I miss you de Blink 182 (2003) / All the small things Después de el éxto de Enema of the state de 1999, su fama se elevó vertiginosamente, se convirtieron en una máquina de sencillos y marcaron la primera mitad de los dosmiles. Finalmente la misma fama terminó por separarlos en 2005; hubo una reunión para 2009, pero su momento terminó. Una banda de muchos sencillos y calidad cuestionable, como algunas otras que caracterizaron esta década.
P.D. Eran divertidos…
Número 13
Everybody's Changing o Somewhere only we know de Keane (2004) Varios artistas son máquinas de sencillos exitosos; sin demeritar su trabajo, pero con sentido crítico, se puede poner en duda la calidad en función de la permanencia de dichas bandas, y Keane es evidente que no superó la barrera del tiempo. Sin embargo, dejaron dos canciones llenas de recuerdos.
Número 12
In the end de Linkin Park (2000) Siempre fue una buena canción, consolidó a Linkin Park como los “últimos mesías del Nü Metal”, y al día de hoy, son considerados como una gran banda.
El tiempo deja al descubierto muchas cosas, en el caso de la música, desenmascara impostores; Linkin Park y este tema ya pasaron con éxito esta prueba.
Número 11
Beautiful day de U2 (2000) Fundado en 1976, U2 ya tenía 25 años como un gran grupo de Rock, su creatividad al componer texturas sonoras y experimentar siempre los había mantenido a la vanguardia musical, los integrantes ya eran millonarios, Bono muy conocido desde entonces por su activismo político, así que podían hacer cualquier cosa y no sería difícil convertirla en un éxito.
El discurso, fue que volverían a sus orígenes con ese álbum; traducido: “se acabaron las ganas de hacer música, pero nos encanta el dinero”. Un poco de mercadotecnia y ¡Hecho! Definitivamente fue un éxito.
Por supuesto que es una visión muy subjetiva lo que se escribe de cada canción, no representa, de ninguna manera, una verdad absoluta. Esperamos con gusto todos los comentarios y opiniones sobre lo que aquí proponemos e invitamos a que conozcan la otra parte de este conteo.